11 ago 2016

Sarco Lange

como ese juego
de lápiz y papel
donde se dibuja una horca
y hay que adivinar una palabra
vas pronunciando letras
si le aciertas se pone la letrita donde va
si no, bueno, empieza tu tormento
tu calvario, empieza la puta cuenta regresiva
cada error es un avance hacia la muerte
de niños ya jugábamos a morir
al final te queda una sola opción
para salvarte de acabar ahorcado
sudas, yo sudaba
quería un abecedario de mil letras
y una cuna tibia
donde reposar todas
y cada una de las pérdidas
mis pérdidas
tenía sólo una oportunidad
no la podías desaprovechar
tu vida dependía de un lápiz asesino
igual que ahora
quién mierda le enseña esos juegos a los niños
si de grandes
las horcas son tan reales.


2 comentarios:

  1. son reales, hermano.
    son tan reales que atraviesan el odio
    por una pipa...

    weón
    arregla conmigo

    la pipa era para que te fumaras un porro

    hacía calor esa mañana...

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  2. Hace más de una semana que te he mandado una solicitud de amistad al Facebook. Despierta weón, deja de chingar y abre los ojos. Qué se está acabando el año, germà.

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