Mira las playas de diciembre
puedes aprender mucho de ellas
del olvido de su plateada indolencia
de sus olas condenadas a lamer la arena
un día tras otro y otro más
de la luz sucia reflejada en cobalto
de las rocas que seguirán ahí
cuando los turistas no sean ni memoria
la naturaleza es sabia y fiera y permanece
mira las playas de diciembre
qué son esas aves negras silenciosas
enormes como augurios de viejas
como si las gaviotas hubieran abandonado
su disfraz de blanca pureza estival
mira cómo planean hambrientas el agua
la facilidad en cobrarse alguna pieza
igual que a ti te pasará cualquier día
si se te ocurre asomar la cabeza a la superficie
si intentas vislumbrar qué hay más allá del fondo
alguien te devorará de inmediato
mira las playas en diciembre
puedes escuchar alguna verdad importante
si atiendes a su sordo rumor de carcajada
ante nuestra condición efímera y fugaz
de marionetas tiradas por hilos tan débiles
como las algas que vienen a morir a esta orilla.
del olvido de su plateada indolencia
de sus olas condenadas a lamer la arena
un día tras otro y otro más
de la luz sucia reflejada en cobalto
de las rocas que seguirán ahí
cuando los turistas no sean ni memoria
la naturaleza es sabia y fiera y permanece
mira las playas de diciembre
qué son esas aves negras silenciosas
enormes como augurios de viejas
como si las gaviotas hubieran abandonado
su disfraz de blanca pureza estival
mira cómo planean hambrientas el agua
la facilidad en cobrarse alguna pieza
igual que a ti te pasará cualquier día
si se te ocurre asomar la cabeza a la superficie
si intentas vislumbrar qué hay más allá del fondo
alguien te devorará de inmediato
mira las playas en diciembre
puedes escuchar alguna verdad importante
si atiendes a su sordo rumor de carcajada
ante nuestra condición efímera y fugaz
de marionetas tiradas por hilos tan débiles
como las algas que vienen a morir a esta orilla.
- Javier Vayá -
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